El acné no es solo uno de los problemas estéticos que afecta los adolescentes, también aparece en los rostros de personas de todas las edades y puede resultar un verdadero problema para nuestra piel.
Como dice el refrán, prevenir es curar y lo más importante para coger a tiempo el acné es lavar nuestra piel diariamente y mantenerla hidratada; así como alimentarnos correctamente. Sin embargo, en muchos casos se trata de un problema que no podemos evitar y para el que necesitamos tratamientos específicos.
Puedes utilizar unas toallitas de Sesderma, indicadas para el tratamiento de pieles grasas y con tendencia acnéica. Limpian profundamente, ya que desobstruyen los poros contribuyendo a la eliminación de espinillas y puntos negros.
Para limpiar el rostro, utiliza también un peeling suave que te ayudará a renovar la piel. Te aconsejamos Lullage Acnexpert. Su Sistema de Triple Acción crono-activa proporciona al instante una piel luminosa, radiante y con una textura más afinada. Las imperfecciones cutáneas (puntos negros, comedones, pigmentación irregular, arrugas…) se corrigen día tras día, se acelera su desaparición y la piel rejuvenece.
Pero no solo necesitas limpieza, también tienes que hidratar tu piel. Puedes combinar los productos, ya que lo importante es que se adapten a tus necesidades.
Lo importante es que tomes precauciones. Por ejemplo, retirar el pelo sobre la el rostro (ya que es malísimo para el acné porque es muy grasiento y, además, es portador de mucha suciedad que puede infectar la zona) y beber mucha agua. ¡Toma nota de estos consejos y olvídate del acné!.