Es una planta procedente de la medicina tradicional china, quizás una a la que más beneficios se le atribuyen. Según cuenta la leyenda, el dios de la montaña la llamó “el secreto de la vida” al entregársela al hombre. Se le asocian desde hace más de 5000 años poderes casi mágicos para mejorar funciones tan diversas como la memoria o la sexualidad.
Sus hojas se asemejan a las de los rosales (aunque más grandes) y sus flores son rojizas y pequeñas. La parte que se utiliza para uso médico es su raíz, en la que se encuentran los principios activos llamados ginsenósidos. Actúa sobre el organismo aumentando la resistencia física y psicológica frente al estrés, devolviendo el equilibrio.
Países como Corea, Rusia o Japón han realizado numerosos estudios sobre esta planta y han descubierto todas sus propiedades, entre ellas estimular la síntesis de proteínas, prevenir la aparición de úlceras gástricas por estrés y reforzar nuestro sistema inmunitario.
El Ginseng se puede consumir en infusión o combinada con otras sustancias como la Jalea Real o Ginkgo Biloba. La mezcla tiene propiedades muy beneficiosas ya que tonifica y fortalece el cuerpo. Está muy recomendado en casos de sobrecarga laboral, desgana, convalecencia, cambios de estación..etc.
Existe varios productos con estas características, y uno de ellos es Arko Real, que combina la Jalea Real (que satisface la demanda energética y nutricional del organismo) y el Ginseng. Solo tienes que tomar de 1 a 2 cápsulas al día antes del desayuno y notarás los resultados.